Existe una América, un sueño y un sol
una fuerza cautiva por su propio don
bajo su cielo humilde y soñador
nace la aurora para contarle a la vida
que somos todos
víctimas de una antipatriota opresión.
Nos han rasgado el alma
han robado nuestro alimento creador
las venas continúan sangrando
porque el blanco invasor continúa dominando
y machacando con su mano
al indio, al mestizo y al de color.
Existe una América, un sueño y un sol
oprimida por un inexistente dios
por sus propios hijos traicionada
apedreada por la mano que engendró.
Corre el sudor sobre la piedra
pisoteado por la ceguera de quien sudó
y flamean inocentes las banderas
queriendo liberarse del asta que las ató.
Existe una América que habla sin voz
grita en las tinieblas
¡Libertad, libertad y unión!
pero los hombres vendidos al sistema
la apresan y golpean
con la misma cadena que una vez se rompió.
Y es que existe una América
o tal vez nunca existió
porque fuimos siempre dominados
causa de nuestra ingenua inhibición.
Temerosos todos del águila y el cazador
desunidos estamos
expuestos a las garras del rapaz opresor
no es la pobreza una condena
condena es vivir de rodillas pudiendo ser dios
y culpables somos de esta pobreza y humillación.
Recordadlo todos
existe una América, un sueño y un sol.
Hay hombres que se enfrentan al sistema
y mueren
otros que se enfrentan al presidente
y mueren
hay hombres que se enfrentan al congreso
y mueren
otros que luchan contra el poder
y también mueren.
Hay hombres que luchan por la vida
porque es vida todo lo que tienen
y sin embargo, mueren
hay otros que se enfrentan a la muerte
y esa sombra omnipotente vence
porque a ella
sea quien fuere que se le enfrente, muere.
Hay hombres que se enfrentan al ministro
y mueren
otros hombres que luchan por el agua, por la tierra
por la selva, por la paz, por el grano de quinua
por la riqueza del mar
por la defensa del ande
por el vuelo del cóndor
y mueren, todos mueren al luchar.
Hay hombres necios que se enfrentan al sistema
y mueren
hay otros que sólo miran indiferentes
pero también mueren
otros más que ni miran ni escuchan
ni pelean ni viven en paz
no hacen nada ni por ellos ni por los demás
y pese a todo, mueren.
Hay hombres que se enfrentan a la iglesia
y mueren
hombres que quieren matar a dios,
pero mueren.
Hay otros hombres que sólo escriben poemas
versos inocentes que exclaman una verdad
pero también mueren
mueren olvidados en lo injusto de su soledad.
Hay hombres que cantan, que ríen, que sufren
hombres que lloran, que gritan, que acusan
hay esos hombres que disparan sin arma
y los otros que matan sin disparar
hay hombres aquí
que han salido a la calle a protestar
y más que glóbulos,
llevan en su sangre un ideal.
Sí, esa victoria anticipada que la razón les da
porque habemos hombres nacidos para luchar
y no será la muerte el final
mas será el comienzo
de esa revolución por la que la vida se da.
Porque hay hombres que se enfrentan al sistema
y viven para toda la eternidad.
Imagina que anduvimos siempre juntos
que no hubo ilusión
que a la postre en silencio mi vida
bautizó la flor.
Imagina que soñamos indisolubles
frente a la meta incumplida
acariciando desde lejos
la llegada que nunca tuvo partida.
No me mires dubitativa
deja que vuele la imaginación
que entre arenas y montañas
caminen aún los pasos inciertos
y que al fondo de la nostalgia
viva musitando el pétalo
un verso de amor.
Imagina que a la hora de la lucha infinita
tu flor mi pecho irrigó
y que los ígneos huesos horizontales
dejaron a la suerte su dolor.
Imagina que ambos nos marchamos
nos fuimos a conocer la revolución
y que vueltos a la vida
una inamovible realidad nos mató.
Pero sólo imagina
idealiza una cama para dos
una copa a media noche
un libro que nadie leyó
un cuadro desnudo en el fondo de los dos
y al fin
imagina que todo esto
alguna vez existió.
