Samuel López
Desde niño me gustaban las líneas, los dibujos, los garabatos y observar el entorno en donde me desenvolvía. Niño retraído y meditabundo, me transformé en un artista directo y honesto frente al lienzo, pero con aires de mis mundos. Mi experiencia laboral se desarrolló entre la serigrafía, imprentas y un periódico, y aprendí a observar las imágenes en CMYK, escala de grises, a hacer igualados de color y descubrí que un color siempre está contaminado.