Amanece y el cuerpo habla
la mujer agita su mano
Morgan busca una caricia
juego cada mañana a ser niño otra vez
Son tiempos furtivos
y la vida parece
sólo parece
más volátil
se mueve
se mece sin parar
en un trozo de madera y cuerda
que alguien por juego colgó
y arrojó
al aire galáctico y bueno
dura casi un suspiro
ligera como el titilar de las estrellas
Cuando la vida se mece
chirriando,
destellando
unos mueren y otros van
es el columpio astral
Una silla ebria es el universo
Gira, levita
vuelo cíclico
Cuerpo y resuello suspendidos
en el vaivén
de las últimas vueltas
hora de bajarse a botar las entrañas
busca la tierra el abrazo de la carne
en viejo vértigo vamos cayendo
es la pálida…
la cuna meciendo
ataúdes fatigados
un paseo a cuerda floja
una fila de funámbulos
¿atarse o soltar la cuerda?
saca bien la cuenta
cinco mariposas
dos gotas carmesíes
tres o cuatro destellos en tu flor húmeda
pasaje de ida
viaja montada en nubes
cruza el antiguo rumor de la lluvia
lunas en el cielo de la soledad
cae
despierta
a
la
orilla
izquierda
de
un
sueño
levanta
dormida
en
el
cauce
de
un
deseo
La vida es un furtivo sueño
que se mece
entre las nubes
como elefantes de agua
El oficio de la vida
es columpiar
los sueños
Para que los sueños sean verdad
la vida debe serlo
al despertar
La vida es un niño
que se mece
en el columpio astral
¿quién seré cuando vuelva a besarte?
¿quién serás cuando me abraces de nuevo?
¿quién hubieras sido si no te hubieras ido?
merodeos estelares
y los recovecos vacíos
espirales para ir y venir a la nada
sigo buscándote
y
ya
no tienes rostro
