Vendedor de fugaces alegrías
aferradas a los hilos con tus manos,
su ímpetu apunta hacia los cielos
tú, ciego, no lo miras abrumado.
Vendedor de globos, pies cansados
si calzas los huaraches del guerrero
vendedor de globos de cara triste
está tu rostro curtido por el yerro.
Hombros solo de globos vendedores.
De la sociedad eres esclavo delirante
con rotas alas van tus pies por Fundadores
entre congoja y soledad recalcitrante.
Alma anclada en quimeras del imperio
quien te programa día a día en limitante,
violencia, odio, desconfianza y vituperio
resuenan en tu espíritu impotente.
Tu miedo ha vencido a la esperanza
la nube de la pena aja tu calma
recuerda, el poder está en tu alma
enfoca tu mente en la abundancia.
Tu juicio enjaulado en simple oficio
tu voluntad rota, autoengañada
de no poder tener más beneficio.
Tu ser implora la libertad robada.
Vendedor de globos, vira el rumbo,
deja a los hilos soltarse de tu mano
libéralos al cielo, abre los brazos
arrebata la dicha y sé Humano.
Recuerda el legado de tus dioses
emprende el vuelo del águila a los cielos
reclama la gloria, recuerda lo que vales
heredero de magnánimos caudales.
Vales más que mil globos atrapados
más que dinero de papel, falacia en vilo
levanta el rostro, enciende los anhelos
no repitas el discurso del olvido.
En tu interior van todos los tesoros
la riqueza de generar en beneficio
prosperidad, opulencia de alegrías
por la puerta de la gratitud y del servicio.
Clausúrale la entrada a la angustia
causada por el pueblo enajenado
atrapado en su limitante diálogo
repetitivo y te lo crees callado.
Aspira al cielo, aprende de tus globos
enfoca tu mirada hacia la gloria
ancla tu fuerza en cumplir tus sueños
lucha con todo hasta cambiar tu historia.
