Dios me trajo al mundo
inmejorablemente
ataviada
Produje
estupor
Y estupro.
Lo acepto: supongamos
que yo soy mortal
y que moriría, por lo tanto
mi belleza
¿Y entonces?
¿Cómo articularle
algún remoto sentido
a esta inconcebible
atrocidad?
Si aquí
sin usted
yo estaría
perdida
(guárdese su sonrisa)
usted aquí
sin mí
no estaría
encontrado.
No me quedé conmigo
al irme con él
Yo no estaba como
para irme con él
No me quedé conmigo
para irme con él
No me llevé con él
al irme con él
No estuve conmigo
cuando estuve con él
Ni estuve con él
cuando estuve con él
para no quedarme
demasiado
conmigo.
Morí como una mujer
—que es como morir
como un hombre—
Morí también como un perro
—que es como mueren también
otros animales:
morí, entonces, como tantísimos animales
que mueren como un perro.
Tenés ya vía regia
de escape o de ingreso:
cumpliste
saltimbanqueaste con los requisitos
superado el descomunal escollo que yo te he sido
un pasaporte te habilita:
alcancé mi fecha inusitada de vencimiento:
al punto que podrías, exhausta
pobrecita, única, recalibrada
vos también muriendo:
festejar.
Tengamos un bebé, Francisco
para tener la satisfacción, Francisco
de tener un bebé, Francisco
Tengamos la satisfacción, Francisco
de tener un bebé, Francisco
para que tengamos la satisfacción
Tengámoslo para tener, Francisco
la satisfacción de tenerlo, Francisco
al bebé.
Se acabaron los 78
le avisé
A Corsini te lo vas a escuchar a Santa Lucía
Por suerte no sos un vulgar espontaneísta
Ni un voluntarista a ultranza
agregué, sin embargo
A esos, los detesto
Aprendí que no estoy en esta vida para merodear
aduje
En la otra seré plenamente una estúpida
En esta, ya no más
Poco después, partió
Traslúcido
Innoble, también
Rayado.
Estoy siendo barrenada
en simultánea
por dos concienzudos
Abundantes torpezas
Poco nos conocemos
Es un ensayo
Uno de mis partenaires
actor en serio
con formación
y bastante parecido al Peter Weller
de Festín desnudo
es un rudo
impostado
El otro no
Y a veces
se distrae
Entre pan y pan
estoy yo
el jamón del sándwich
espectadora presencial de muchos
y dúctil protagonista de varios
apareamientos así diseñados
para las cámaras
La misma que, sin alarde
por fin percibe, no exenta de palabras
que en la doble penetración
en toda doble penetración
en esta misma doble penetración
ahora y conmigo
se interpenetran los machos
se buscan y espadean
a través de mí.
No, mirá, no
No, mirá
No, no
Yo sólo deseaba que nos desnudáramos
Pero te desenfrenaste, no sé qué te pasó
Deseaba, y sigo deseando
pero no, mirá, no
No... no...
¡Me mareo, me voy, mordeme acá
Don Juan Quijote, Tenorio de la Mancha!
Yo sola, no; vos, conmigo
¡Mordé, mordé!
Ay, no quiero, me da bronca
Vos seguís y ya está, se produce
Ay, no; fue el último.
Rubén Hernández Hernández
Ramón Valle Muñoz
Ana Romano Argentina
Rico | Villanueva | Fernández
Rubén Hernández Hernández
Festival Cultural de Mayo
Murales
Collage