Jorge Marín (Uruapan, Michoacán, 1963), es uno de los mayores exponentes contemporáneos del arte figurativo en México. Su carrera artística ha sido multifacética, lo que le ha permitido abarcar distintas disciplinas y trabajar con diversos materiales. Sin embargo, su búsqueda plástica lo llevó al bronce y, desde entonces, lo convirtió en su signo distintivo. Este metal, dado su proceso, posibilita resaltar la perfección de la materia viva, mediante los detalles anatómicos y las texturas.
Así, con sus bronces ha incursionado en diferentes dimensiones escultórica, desde la miniatura hasta lo monumental, formato que ha exhibido tanto en México como en el extranjero, apoderándose del espacio público y generando un diálogo inédito entre la obra de arte y el espectador quien, lo mismo, se apropia de la majestuosidad de un par de enormes alas o se vuelve cómplice de los personajes fantásticos que transforman los entornos cotidianos.
Martín ha participado en más de 325 exposiciones en museos y galerías de Francia, España, Portugal, Alemania, Inglaterra, Bélgica, Noruega, Hungría, Rumania, Rusia, Letonia, Azerbaiyán, Emiratos Árabes, Egipto, Singapur, Indonesia, China, Hong Kong y Tailandia, con la presencia también en el continente americano en Estados Unidos, Canadá, Costa Rica, Panamá, El Salvador, Guatemala y, por supuesto, en México, en donde sus esculturas se presentan en calles, plazas y lugares multitudinarios con la intención de que su arte se integre a la vida diaria de los ciudadanos.
En 2019 fue nombrado Embajador de Buena Voluntad de la UNICEF México debido su labor que, por medio de talleres de creatividad artística, ha desempeñado en beneficio de los derechos de niños, niñas y adolescentes.
